Los procesos de manufactura son básicamente actividades complejas llevadas a cabo por profesionales que tienen una gran variedad de disciplinas y conocimientos técnicos, así como una amplia gama de maquinaria, herramientas y equipos con distintos niveles de automatización, tales como computadoras, robots, entre otros.
Los procesos de manufactura discretos son quizás uno de los más difíciles de facilitar porque el proceso real puede variar desde unas pocas configuraciones y cambios hasta varios con una mayor cantidad, lo que significa un retraso más largo. es vital en el control de calidad, sobre todo en este nivel. Sus requisitos de configuración son mínimos o tienen pocos cambios, por lo que las velocidades de operación se pueden aumentar o disminuir para satisfacer las demandas o requisitos del cliente.
La manufactura en talleres, a diferencia de la manufactura discreta o repetitiva, utiliza zonas de producción en lugar de líneas de montaje. Los procesos de manufactura por lotes comparten similitudes con los procesos discretos y de taller. Dependiendo de la demanda del consumidor, un lote podría ser suficiente para satisfacer esa demanda.