Los procesos de manufactura que se conocen hoy en día han evolucionado en cuanto a criterios de operación y efectividad, siendo un indicador fiable del desempeño de cada una de las entidades.

Estos procedimientos son variados entre sí, por lo que factores como la calidad o la cantidad pueden variar dependiendo del tipo de material que se utilice o del área en la que se ejecuten.

A continuación, explicaremos algunos ejemplos de procesos de manufactura que se emplean en el ámbito industrial con la finalidad de distinguirlos y conocerlos mejor.

Discreto

El primero de los ejemplos de procesos de manufactura es el desarrollo de producción discreto, siendo uno de los más difíciles de ejecutar al tener una fabricación que está basada en listas de materiales o ensambles, como en el caso de automóviles, equipos domésticos, industriales o computadoras.

Su característica principal es que otorga los componentes por separado, además de que los elementos que lo conforman pueden ser desensamblados y volver a formar parte del inventario de los materiales, haciendo que los productos originados en este proceso gocen de una vida útil larga.

Repetitivo

El proceso de manufactura repetitivo está presente en varios sectores de la industria que manejan un desarrollo en masa, elaborando los mismos productos con la misma materia prima durante largos periodos de tiempo.

Como parte de sus requisitos de configuración este proceso cuenta con cambios mínimos, por lo que las velocidades de operación se pueden aumentar o disminuir para satisfacer las demandas o requisitos del cliente.

La baja complejidad de fabricación se compensa con la gran estabilidad que ofrece, de manera que entre sus ventajas destacan los precios bajos y el poco personal con experiencia que se necesita.

Talleres

Los términos made-to-order (MTO) o made-to-stock (MTS) pertenecen a los procesos de producción de talleres, donde los lotes son más pequeños y personalizados debido a que la manufactura es bajo pedido.

Los artículos finales se hacen de manera personalizada dependiendo de la demanda del cliente, este tipo de desarrollo también tiene la característica de que puede operar de manera híbrida, es decir, con mano de obra y máquinas.

Continuo

El último de los ejemplos de procesos de manufactura es el conocido como continuo, este se caracteriza por su desarrollo lineal en el que no se detienen sus actividades.

Las fábricas que realizan un mismo producto sin tener alteración alguna suelen ejecutar este proceso, por lo que la mayoría de proyectos del sector agroalimentario y algunos de la industria minera son quienes manufacturan bajo este medio.

Es importante conocer todo los procesos de manufactura existentes con el propósito de estar familiarizado con los beneficios de cada uno de ellos y elegir el que más se adecúe a las exigencias de su empresa.

En SDI contamos con soluciones especializadas para el sector industrial y las actividades manufactureras, ¡póngase en contacto con nosotros y asesórese con los expertos en automatización y servicios integrales!