El comercio internacional de productos industriales existe desde los primeros tiempos de la civilización humana. En su forma más básica, es el proceso de intercambio de bienes y servicios entre dos o más partes. A menudo se debaten los beneficios del comercio, pero no se puede negar que puede ser una poderosa herramienta para promover la eficiencia productiva.
Al participar en el comercio industrial, las empresas pueden especializarse en áreas específicas, lo que puede dar lugar a productos y servicios de mayor calidad. Además, este tipo de comercio puede ayudar a crear empleo y estimular el crecimiento económico.
El comercio industrial es, por tanto, una parte vital de la economía y debe fomentarse.
Este artículo explorará el papel del comercio industrial en la economía actual y analizará algunas de las formas en que puede beneficiar tanto a las empresas como a los consumidores.
El comercio industrial es un término utilizado para describir el intercambio a gran escala de bienes y servicios entre los distintos países a través de las empresas.
Implica tanto la importación, que consiste en introducir mercancías extranjeras en un país, como la exportación, que consiste en vender mercancías nacionales en el extranjero.
El comercio industrial se compone del movimiento de materias primas, productos intermedios y productos acabados.
También, abarca una variedad de servicios como el mantenimiento y la reparación, la ingeniería, la investigación y el desarrollo o las actividades de formación.
Las empresas que se dedican al comercio industrial suelen ser grandes multinacionales que operan a escala mundial y disponen de importantes recursos financieros.
Este tipo de comercio suele implicar contratos a largo plazo entre empresas, en lugar de acuerdos puntuales.
Esto se debe a la complejidad de enviar y producir mercancías a gran escala, a menudo a través de múltiples fronteras internacionales.
Existen dos modalidades del comercio industrial, el intraindustrial y el interindustrial.
En cuánto al comercio interindustrial, es aquel en el que se intercambian productos o servicios que provienen de diferentes sectores.
Este tipo de comercio se basa en las diferentes ventajas comparativas de las industrias de cada país.
Tomemos cómo ejemplo un país A con fuerte agricultura y un país B cuya fortaleza es la manufactura de tractores.
El país A envía fruta al país B y este envía tractores al país A.
El comercio intraindustrial ocurre cuándo dos países intercambian bienes o servicios pertenecientes a un mismo sector.
Por ejemplo, el país A está cosechando naranjas que envía al país B y éste, que está cosechando espárragos, los envía al país A.