CONSEJOS PARA EVITAR COLAPSOS EN RACKS INDUSTRIALES

Los racks industriales son una parte fundamental de los almacenes y permiten el almacenamiento y la organización de los productos de manera eficiente. Sin embargo, los colapsos en racks pueden ser peligrosos y causar lesiones graves a los trabajadores y daños a los productos y al equipo. A continuación, se presentan algunos consejos para evitar colapsos en racks industriales:

Inspección regular: Es importante realizar una inspección regular de los racks industriales para detectar cualquier signo de debilidad, deformación o daño. Si se detecta alguna anomalía, se debe reparar o reemplazar el rack de inmediato.

Carga adecuada: Se debe asegurar que los racks industriales estén cargados de manera adecuada y uniforme. Las cargas desequilibradas o sobrecargadas pueden ejercer presión excesiva sobre los racks y causar su colapso.

Cumplimiento de las especificaciones: Se debe seguir las especificaciones y las instrucciones del fabricante para la instalación, el mantenimiento y el uso de los racks industriales. Los racks que no se usan según las especificaciones del fabricante pueden ser menos seguros y más propensos a colapsar.

Uso de accesorios y refuerzos: Los accesorios y los refuerzos adecuados pueden mejorar la capacidad de carga y la estabilidad de los racks industriales. Es importante utilizar los accesorios y refuerzos adecuados para el tipo de carga que se está almacenando.

Entrenamiento: Los trabajadores deben recibir una formación adecuada sobre cómo utilizar los racks industriales de manera segura y eficiente. Deben ser conscientes de las limitaciones del rack y de cómo cargarlo correctamente.

Separación adecuada: Se debe asegurar que los racks industriales estén separados adecuadamente de otros equipos y áreas de trabajo. Esto permitirá una fácil carga y descarga de los productos y evitará colisiones con otros equipos.

Mantenimiento: Se debe realizar un mantenimiento regular de los racks industriales, incluyendo la reparación de cualquier daño, el reemplazo de piezas dañadas y la limpieza regular.

Siguiendo estos consejos, se puede reducir el riesgo de colapsos en racks industriales y mejorar.

CARACTERÍSTICAS QUE DEBEN TENER LOS RACKS PARA EL ALMACENAJE EN FRÍO

Los racks para el almacenaje en frío deben tener ciertas características específicas para garantizar la seguridad y la calidad de los productos almacenados en ellos. Algunas de las características que deben tener los racks para el almacenaje en frío son:

Resistencia a la corrosión: Los racks deben estar construidos con materiales resistentes a la corrosión para evitar la oxidación y el deterioro por la exposición a bajas temperaturas y a la humedad.

Aislamiento térmico: Los racks deben tener un buen aislamiento térmico para mantener una temperatura constante y estable en el ambiente de almacenamiento.

Superficies lisas: Las superficies de los racks deben ser lisas y fáciles de limpiar para evitar la acumulación de bacterias y facilitar la limpieza y desinfección.

Diseño modular: Los racks deben ser modulares para adaptarse a diferentes espacios y necesidades de almacenamiento.

Sistema de ventilación: Los racks deben contar con un sistema de ventilación que permita la circulación del aire frío para mantener una temperatura uniforme y evitar la formación de condensación.

Capacidad de carga: Los racks deben tener una capacidad de carga adecuada para soportar el peso de los productos almacenados sin deformarse ni romperse.

Facilidad de acceso: Los racks deben permitir un fácil acceso a los productos almacenados para facilitar su manipulación y reducir el tiempo de almacenamiento.

Estabilidad: Los racks deben ser estables y estar bien fijados al suelo para evitar movimientos bruscos que puedan dañar los productos almacenados o causar accidentes.

El rol de la industria del acero en el avance de la economía

A nivel nacional hay poco más de 13 millones de toneladas de materiales catalogados como residuos que en países desarrollados son tipificados como subproductos para usarse como materia prima, al tiempo que se estima que la circularidad podría incrementar entre un 3% y un 4% el PIB nacional. En el marco de la construcción de una hoja de ruta para la economía circular en Chile, se comienzan a visualizar una serie de procesos y sectores productivos con potencial para impulsar esta tendencia en el país, y entre ellos uno de los que hoy está avanzando con más fuerza a nivel global es la industria del acero, que presenta también grandes oportunidades y avances en Chile no solo en beneficio del propio sector, sino también para otros como el de la construcción y la industria cementera.

Aunque aún no parece estar cercana la vacuna que permita hablar en serio de un retorno seguro de las actividades a nivel global -no estaría disponible a nivel masivo al menos hasta mediados de 2021, según la OMS-, las sociedades y las economías comienzan a retomar un nivel de actividad que permite ir ya visualizando los caminos a la recuperación mundial tras la extendida crisis causada por la pandemia del coronavirus. Y cada vez suman más las voces desde el mundo ciudadano, académico, financiero, de economistas de renombre mundial, e incluso de continentes completos como en el caso del Pacto Verde europeo, que buscan avanzar hacia un nuevo tipo de desarrollo económico más sostenible. No solo para el planeta, también para las sociedades.

Hace unos días, de hecho, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, volvió a recordar que el mundo enfrenta hoy dos crisis urgentes, el Covid-19 y el cambio climático, y que es necesario que “abordemos ambas y dejemos a las generaciones futuras la esperanza de que este momento sea un verdadero punto de inflexión para la gente y el planeta”.

Y en esa línea, describió seis medidas climáticas con miras a una recuperación sostenible: invertir en empleos “verdes”, no rescatar a las industrias contaminantes, acabar con los subsidios a los combustibles fósiles, tener en cuenta el riesgo climático en todas las medidas financieras y normativas, trabajar juntos y, lo más importante, no dejar a nadie atrás. Y junto con ello, pidió a todos los países, especialmente a los miembros del G20 -el grupo de las naciones más industrializadas- que se comprometan a implementar la neutralidad de carbono antes del año 2050.

Una visión que también ha sido recogida por distintos actores en el país, donde han surgido varios llamados a una reactivación sostenible tras la crisis social y económica que ha cruzado al país en los últimos 10 meses. Y en esta línea, quizás la propuesta más concreta se registró en marzo de este año, cuando el coronavirus recién mostraba sus primeros contagios en el país, y el Ministerio del Medio Ambiente convocó a 25 actores representativos de los distintos sectores del país a iniciar el trabajo para elaborar una hoja de ruta que estableciera los lineamientos y objetivos para implementar la economía circular en Chile con un horizonte de cumplimiento a 2040. Si bien la primera meta declarada es que a ese año solo un 10% de los residuos del país termine en un relleno sanitario, los objetivos son mucho más ambiciosos, y apuntan a una transformación de fondo en el sistema productivo del país.

“Los criterios de producción trazables al concepto de circularidad han tenido un fuerte impulso en los últimos años en distintas economías a lo largo del mundo, especialmente por la mayor conciencia que existe respecto a la necesidad de acciones de mitigación o adaptación climática. En efecto, el modelo de circularidad lleva implícito la optimización en el uso de los recursos, lo que otorga un sello de sustentabilidad a los procesos productivos que lo internalizan”, dice Jorge Cáceres, director del Centro de Medio Ambiente y Energía de la SOFOFA.